
POR: DIANA MARCELA PEÑA REÁTIGA
He ensayado mil formas de escribir este poema.
Mil formas de nombrarte en cada vocablo
para que habites en él.
Hermana, te escribo sin amor y sin odio. Sin apego y con rabia.
Te escribo porque eres noticia nacional e internacional,
porque al nombrarte conjuro el olvido y exijo no repetición.
Alzo la voz en coro,
con mis hermanas alzo la voz.
Quiero que se haga grito este poema
para que llegue a las estrellas y pueda alcanzarte.
Juliana, mujer de raíces fuertes,
tu nombre se alza, aunque tu voz se apague
Hoy se resquebraja una llama
y su luz nos inunda en marejada.
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